El XVI Festival internacional de teatro, un sistema complejo de promoción, animación y diversidad cultural
Mariela Hernández
Caracas- 2011
Introducción
El Teatro, una representación artística
un suceso, una palabra, un aprendizaje…
Cada dos años se da inicio a un nuevo Festival Internacional de Teatro de Caracas (FITC), el teatro de todo el mundo viene a ejercer su función social educativa en la capital de Venezuela, el hecho de que en este país exista un público fiel a un festival teatral, ya es síntoma evidente que el venezolano disfruta del teatro, trata de comprenderlo y de aproximarse a él. Gracias a este evento los espectadores caraqueños tienen la oportunidad de enfrentarse con una realidad cultural distinta. La Promoción y Animación Cultural están directamente vinculadas con la organización de festivales teatrales como éste y ese es precisamente el objetivo de esta investigación, conocer qué características de la Promoción y Animación cultural se manifiestan en el XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas.
El Teatro es un arte que ha marcado una posición importante en el desarrollo de las sociedades; desde sus orígenes ha sido una expresión de las diferentes culturas del mundo, sirve de aprendizaje artístico, deleite estético, escuela, modo de recreación; pero sobre todo sirve para transmitir sentimientos y modos de vida de cada una de las culturas en las que se representa. En la actualidad, en varios países del mundo e incluso se podría afirmar que en la mayoría, se le imprime al teatro una función recreativa o simplemente sirve como forma de distracción; pero él teatro no sólo es eso, porque representa un medio de comunicación artístico universal, espontáneo y directo.
En Venezuela, mucho antes de que la tradición hispánica llegara a estas tierras, con el proceso de colonización, ya los indígenas presentaban las primeras manifestaciones proto-teatrales, o teatrales rudimentarias, como las pantomimas en el caso de los Piaroa, y los ritos que ponen en escena las narraciones maravillosas protagonizadas por personajes de carácter divino y que mantienen la historia de la etnia yanomami, posteriormente tras la llegada de los españoles y de la población traída de África, las manifestaciones religiosas y artísticas se llenaron de una mezcla exquisita que ha dado como resultado la diversidad del ser latinoamericano.
Desde ese momento y hasta ahora las artes escénicas siempre han estado presentes a lo largo de la historia de los venezolanos, el cual en su desenvolvimiento social utiliza elementos que son propios del teatro, ya que este arte no es sólo una representación que se puede enmarcar dentro de una sala convencional, actores y público; el teatro como forma de representación esta presente en la mayoría de los actos sociales del país.
Producto de esa teatralidad “inconsciente” ha sido también la afluencia de espectadores y creadores que lo hacen diverso y de directores que se esfuerzan cada día más para llegar a un mayor número de espectadores. Es en este aspecto cuando se hace imposible hablar de teatro en Caracas, sin hacer referencia al Festival Internacional de Teatro, el cual desde el año 1973 ha mantenido un público que le ha permitido permanecer en el tiempo, y por supuesto ha facilitado que en la actualidad pueda producirse un análisis acertado sobre como la Promoción, la Animación Cultural y la Diversidad, se manifiestan en dicho festival.
La realización de esta investigación estará comprendida en tres fases, la primera de ellas es entender y conocer como fue la XVI edición del Festival Internacional de Teatro de Caracas (XVI FITC 2006); en esta etapa se explica cuales fueron sus características fundamentales, los detalles importantes de las obras representadas y, sobre todo, las particularidades propias de cada país, reflejadas en sus obras de teatro, pues cada uno de estos países es trasmisor de su cultura a través de sus trabajos escénicos, es así como en el XVI Festival Internacional de Teatro, se produce una “internacionalización de la cultura (que se refiere a la apertura de fronteras a los bienes y a los contenidos culturales de otros países)” y, por supuesto, dentro de esta “apertura de bienes culturales” vienen incluidos la transmisión y construcción de valores.(Arizpe, Alonso 2001, p. 27) Es posible que a través de la presentación de obras teatrales internacionales se pueda entender la cosmovisión de la sociedad que la representa.
Igualmente, se explicarán algunos detalles del origen del XVI festival; y todos los pormenores referentes a la organización artística y desarrollo de los espectáculos, pero sobre todo se enfocará la investigación, hacia la posición del público, que sin duda alguna juega un papel de suma importancia para comprender la aplicación de las categorías de Promoción y Animación Cultural.
Las categorías de Promoción y Animación Cultural han sido definidas siempre como dos teorías distintas, a través del análisis realizado del XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas se puede determinar cómo ambas se pueden encontrar y aplicar en la práctica, sin necesidad de mezclarlas una con la otra.
La investigación tomó en cuenta la importancia de este evento como ejemplo de desarrollo artístico, cultural y modelo de lo que la Promoción y la Animación Cultural pueden ser en Venezuela, porque efectivamente el XVI FITC entra dentro de los modelos de Promoción y Animación Cultural, pero ¿cuáles son las características que distinguen y separan a ambas tendencias dentro de un mismo evento? o ¿Cuales características hacen posible que en un evento como el XVI FITC puedan surgir de manera conjunta estas categorías, integrándose una con la otra, sin necesidad de confundirlas?.
En una segunda fase se estudiaran las características de Promoción y Animación Cultural que se manifiestan en el Festival, es necesario concebir este evento como un sistema donde se encuentran integrados los siguientes componentes: la Animación, la Promoción, y la Diversidad Cultural. Cada una de estas unidades tienen características distintas, que se diferencian en sus conceptos y al aplicarlas a un evento cultural concreto como lo es el XVI Festival Internacional de Teatro, permiten una mejor herramienta de análisis, en esta fase de la investigación, se llegará a las conclusiones necesarias para llegar al objetivo general de este estudio, en el cual el pensamiento complejo de Edgar Morín representa una parte fundamental.
Las conclusiones están fundamentadas en el pensamiento y aportes de Edgar Morín y sus postulados referentes al Pensamiento Complejo y a la importancia de la interdisciplinaridad del saber. Esta será la tercera fase de la investigación.
Se justifica la realización de un estudio como este, porque el Festival Internacional de Teatro de Caracas (FITC) ha sido visto desde diversas perspectivas: historia, análisis de obras, calidad actoral de los países participantes, vestuario, dispositivos teatrales, crítica, etc., el aporte ha sido vasto e importante; sin embargo, todas las investigaciones giran en torno al hecho escénico propiamente dicho y a su interpretación. Sin restar méritos a los anteriores enfoques analíticos que se han hecho sobre FITC, el presente trabajo analiza la pertinencia de este evento en tanto que la Promoción, Animación, y Diversidad Cultural son paradigmas no vinculados al festival en estudios previos, al menos a nivel de Licenciatura en Artes, mención Promoción Cultural.
El estudio permite conocer cuál es la verdadera utilidad que tienen las categorías de Promoción y Animación Cultural, y sobre todo ¿Cómo se pueden aplicar en un evento cultural concreto? En esta investigación estos conceptos podrán encontrarse en un nivel intermedio entre lo teórico y lo práctico facilitando el diálogo entre los principales autores que han abordado el tema.
En síntesis el problema central de este análisis gira en torno a la respuesta de la siguiente pregunta: ¿Cuáles son los rasgos característicos de Promoción, Animación y Diversidad Cultural que se encuentran presentes en el XVI FITC? Para contestar a esta interrogante es necesario conocer en qué consiste el festival, explicar el basamento teórico de los conceptos de Promoción y Animación Cultural para luego ver cómo estos dos conceptos se integran en un “sistema complejo”como el propuesto por Edgar Morín
Objetivo General: Analizar el XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas como un sistema complejo de Promoción y Animación Cultural.
Objetivo Específicos:
1.- Determinar las características que distinguen al XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas como medio de Promoción Cultural.
2.- Determinar cuáles son las características que distinguen al XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas como medio de Animación Cultural.
3.- Describir las características que distinguen al XVI Festival Internacional de Teatro como un sistema complejo donde se integran la Animación, la Promoción y la Diversidad Cultural.
Abordaje Metodológico
El desafío de la complejidad es pensar complejamente
como metodología de acción cotidiana
Edgar Morin
El presente estudio se enmarca dentro del paradigma cualitativo de investigación, ya que para realizar un análisis del XVI FITC como un evento en donde se encuentran la Promoción, la Animación y la Diversidad Cultural, es necesario utilizar un método que permita acercarse a la realidad de varios espectadores al mismo tiempo, es así como la investigación cualitativa representa un elemento adecuado para el desarrollo de este estudio.
El XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas es un evento que se debe analizar desde su interior, es importante ver su estructuración y la participación del público, y luego a partir de esa observación compleja ofrecer conclusiones abiertas que establezcan una verdadera comprensión de las categorías de Promoción y Animación Cultural, presentes en el XVI FITC.
Las bases del paradigma cualitativo se encuentran en su mayoría en la fenomenología como elemento epistemológico:
El principio del método fenomenológico es la búsqueda de la esencia del fenómeno, el cual se define como ser aparente. La experiencia del investigador que realiza su búsqueda de conocimiento a través de fenomenológica debe ser el fenómeno (Rusque 1999 p. 23)
Esta lógica, que constituye uno de los fundamentos del enfoque fenomenológico, consiste en apoyarse en la experiencia del hecho. En otras palabras, es la cualidad descriptiva de los datos recogidos sobre las experiencias de un fenómeno vivido, lo que permite el acceso a las unidades significativas de la experiencia, que son las que en definitiva hacen posible el análisis fenomenológico. Las unidades de significación son los elementos constituyentes que determinan el contexto del fenómeno explorado y que incorpora la parte de significados inherentes al contexto (Rusque 1999 p. 26).
Como bien lo manifiesta Ana María Rusque: Es la cualidad descriptiva de los datos recogidos sobre experiencias de un fenómeno vivido, en esta investigación se describe a detalle el XVI FITC a través de los datos tomados en la vivencia directa del evento, de esta manera se garantiza el proceso de estudio inmediato y con bastantes elementos que permiten ofrecer conclusiones dirigidas al objetivo de esta investigación.
La subjetividad se convierte en una manera de percibir la realidad, cuando un investigador se aproxima a su objeto de estudio va a interpretar la realidad que está persiguiendo y en ese sentido dejará de ser objetiva.
El análisis del XVI FITC se concibió a partir de las experiencias de la investigadora, la cual asistió a una totalidad de 18 piezas teatrales del festival, entre las cuales se destacaron piezas internacionales, nacionales y teatro de calle, permitiéndole concebir el evento no sólo como una serie de piezas de teatro individuales, sino más bien como una unidad, en la cual se pudo analizar: la posición del público; en tanto a su asistencia, aceptación y su participación durante el evento, la calidad de las piezas teatrales; las cuales se pudieron observar en tanto elementos escénicos como escenografía y desempeño actoral, siendo estos aportes fundamentales para el Teatro Venezolano.
Para los fines de la investigación se trata de la vivencia original de la experiencia propiamente dicha. De esta manera se logra la esencia de lo que es percibido en la experiencia, que permite vivir el fenómeno estudiado como si fuera una primera aproximación a ésta(…) (Rusque 1999 p. 24)
En este sentido, es fundamental la observación como técnica de recolección de datos, vivir el XVI FITC, conocer que aportes escénicos importantes ofrecieron sus obras y sobre todo, analizar cómo fue la posición del público en el evento, permite conocer la importancia del pensamiento complejo como metodología de estudio.
Dentro del proceso de esta observación participante se utilizó como técnica aplicada el uso de las entrevistas a profesores con amplia trayectoria en el área de artes escénicas en sus diferentes especificaciones, es el caso de: Orlando Rodríguez, quien ha tenido la oportunidad de ver todas las ediciones del Festival Internacional de Teatro, lo cual le ha permitido ver como ha sido su evolución en el tiempo, y lo convierte en un testigo fundamental para la realización de esta investigación.
Continuando con él desarrollo de las entrevistas también se interrogó a Luis Chesney y Humberto Orsini quienes poseen larga trayectoria en el área teatral, de igual forma Orlando Arocha (director artístico del XVI FITC), aportó su experiencia a la investigación como representante fiel de la organización. Cabe destacar que estas entrevistas fueron semiestructuradas.
La experiencia de estas personas en el área de las artes escénicas y sobre todo en la programación, concepción y elaboración de los Festivales internacionales de Teatro que se han sucedido en Caracas desde el año 1973, hace posible la necesidad de explicar con sus propias palabras, siempre respondiendo a una serie de planteamientos organizados para cumplir con los objetivos de la presente investigación.
CAPITULO I
El XVI Festival Internacional de Teatro, un escenario de Diversidad Cultural
“El teatro es un arte de intercambios y encuentros que lo hacen mestizo, diverso y heterogéneo. El festival por tanto, se ha propuesto desde sus inicios cumplir con esa diversidad, con las idas y vueltas, las fluctuaciones y transformaciones que les son tan propias” Carmen Ramia.
El Festival Internacional de Teatro de Caracas, es un espacio plural que permite al público caraqueño entrar en contacto con las diferentes culturas del mundo, es un lugar especial para los espectadores que hacen de su forma de vida las artes escénicas: escritores, directores, escenográfos, tramoyistas, actores, estudiantes de teatro, entre muchos otros.
Se decidió centrar el objeto principal de esta investigación en el XVI FITC, ya que es la última, la más reciente, y sobre todo en esta edición se tuvo un acceso directo y total a la mayoría de las funciones, por otra parte se consideró importante analizar la asistencia del público al evento, hecho que únicamente era posible a través de la vivencia directa del mismo. Por esta la investigación se desarrollará y centrará en el XVI FITC 2006.
1.1 Historia de la Fundación del FITC
Para poder conocer un poco el XVI FITC, es necesario en primera instancia conocer cómo fúe el origen de este evento. ¿Cómo surgió? La iniciativa inicial fúe de Carlos Giménez, importante gerente, promotor y director de teatro, fundador del Grupo Rajatabla y de otras instituciones teatrales destacadas. Describir en su totalidad cuál es la importancia de este hombre para la historia del teatro en Caracas, o incluso el teatro de Venezuela, es una tarea bastante larga, por la calidad y trascendencia de su obra y de su vida.
Entre sus trabajos de mayor proyección internacional están, "Señor Presidente", versión teatral de la novela de Miguel Ángel Asturias, "Bolívar" y "La muerte de García Lorca" de José Antonio Rial, "El Coronel no tiene quien le escriba" adaptación teatral de la novela de Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura. Montó obras de Shakespeare, Calderón de la Barca, Lope de Vega, Valle-Inclán, García Lorca, Beckett, Durrenmatt, Brecht, Tolstoi, Chejov, entre otras. (Pareja Miriam, 1998)
Pero Carlos Giménez no estaba solo para poder hacer posible el festival contó con el apoyo del Ateneo de Caracas, quien a través de Fundateneofestival coordinó la logística, financiamiento y otros detalles, haciendo posible que los venezolanos tuvieran contacto con la escena internacional.
El Ateneo de Caracas, fundado a las seis de la tarde del 8 de agosto de 1931 e instalado en la planta alta de la casa n.- 43, ubicada de Marrón a Cují, en la avenida Este, se convirtió a lo largo de su intenso y complejo desarrollo en las ultimas tres décadas, en el más poderoso y monumental “portaviones”… para las artes escénicas (…) y, por si fuera poco, en la matriz de decisivos festivales nacionales e internacionales, verdaderas cátedras para el aprendizaje, y el intercambio cultural de artistas y espectadores(…) Sin esta institución, Carlos Gimenez no hubiese podido empezar y desarrollar buena parte de su aventura venezolana, como él lo admitió. (Moreno-Uribe 2003. p. 25)
De acuerdo a lo anterior, Carlos Giménez en compañía de un grupo de hombres de teatro, decidieron traer a Venezuela lo mejor de la escena internacional, pero no se contaba con una experiencia previa, era necesario un modelo a seguir, y para ello se utilizó un festival realizado en Colombia, específicamente, era el Festival Latinoamericano de Teatro Universitario de Manizales, se aprovechaban las compañías que ya venían de realizar sus presentaciones en este país vecino, para que las mismas fueran representadas en la ciudad de Caracas.
Este primer festival se realizó entre el 30 de Agosto y el 30 de Septiembre de 1973, para este momento el Festival tenia serias limitaciones de recursos, salas, ausencia de países participantes, pero la calidad de las obras presentadas a nivel escénico eran por lo general muy elevado, es importante destacar que en la actualidad no se encuentra un único proyecto escrito que pueda dar luces de como fue esta primera etapa del festival, la información recolectada ha sido en su mayoría por historias vivientes, como es el caso del profesor Orlando Rodríguez, testigo de todo el festival, desde su inicio hasta su última edición en el 2006 ha tenido la dicha de ver todos las ediciones, al respecto manifiesta que:
En la época de Carlos Giménez había una mayor presencia y participación del público, una mejor selección de elencos, una mayor relación con los grupos venezolanos por que él originaba por ejemplo que después [del festival] los distintos países invitaran a los elencos venezolanos a cotejarse con su público, de manara que el carácter de comunicación, de relación y de participación, se lograba en esos festivales (Rodríguez Orlando, en entrevista realizada por Mariela Hernández)
En consecuencia, para entender el surgimiento del Festival Internacional de Teatro de Caracas es necesario no sólo consultar a los testigos de las diferentes ediciones, sino también las diferentes investigaciones realizadas en su mayoría por estudiantes de la escuela de Artes y por textos editados por Fundateneofestival.
El Festival diseño una logística para traer las compañías directamente del Festival de Manizales (Colombia) organizada principalmente por el señor José Tejera (Pepe Tejera) por esta razón se ha hablado que el Festival Internacional de Teatro de Caracas era una extensión del Festival de Manizales. En 1976, sucede un acontecimiento importante y es el
Hecho de que Caracas lograra convencer a una institucionalidad como la UNESCO para transferir el Festival de las Naciones por primera vez en su historia. Así la IV Sesión mundial del teatro de las naciones es, a la vez el IV Festival Internacional de Teatro de Caracas con una dimensión que lo convierte en el evento mas significativo de la década: nunca se habían reunido creadores del nivel de los que se consagran a discutir conjuntamente en una misma mesa.(Hernández, María 2005. p. 26)
Poco a poco, y partir de este momento fueron creciendo la cantidad de salas y países que intervinieron en el festival, el cual en principio se realizada cada año, pero por la situación económica de los años siguientes, se empezó a realizar cada dos años, en la medida en que este evento fue avanzando con el tiempo se pudo ver “un crecimiento in crescendo en cuanto a su calidad tanto organizativa como de las representaciones(…), el teatro presentado se acerco al mejor del mundo y a su vez mostró una gran variedad de tendencias dentro del contexto de las representaciones teatrales”. (Hernández, María 2005. p. 10)
Todas las personas entrevistadas para dar aportes a esta investigación recordaron a Carlos Giménez como el gran hombre de teatro, como el creador de los primeros festivales internacionales, que logró conformar un público ahbituado a estos encuentros, y sobre todo un público que respeta la diversidad y la participación:
Pienso una parte importante a considerar (…) que es la necesidad de la gente a participar, porque la gente se tomo el Festival para ellos, porque querían participar y hacer que el festival fuera producto de ellos. En última instancia se hace con su plata. El sentido es ese: primero la necesidad de participar activamente, por que se puede participar pasivamente. Entonces creo que el festival desfaso al sector cultural (…) Y el público demostró que quiere al Festival, que quiere que se siga haciendo, que se mejore, que se corrija. (…) (Giménez Carlos, en entrevista realizada por Moreno-Uribe, 2003. p. 53).
)
Es así como transcurrido el tiempo, hoy en día se puede hablar del XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas, celebrado entre el 31 de Marzo y el 16 de Abril de 2006. Esta edición del FITC tuvo muchos inconvenientes para su realización, según la información ofrecida a los medios de comunicación por la Directora general de Funtaneofestival Carmen Ramia, quien junto a María Teresa Castillo, se han encargado de la realización de los festivales desde el lamentable fallecimiento de Carlos Giménez, en el año 1993, al respecto manifestó que “Hemos siempre chocado con obstáculos y problemas, pero nunca tantos y tan diversos como los que hemos tenido que sortear para sacar adelante esta decimosexta entrega del evento que creó Carlos Giménez en 1973”. (Moreno-Uribe 2006)
El primero de los inconvenientes fue el financiamiento el cual según
Enfatiza que para sacar adelante la organización del XVI Festival tuvo que resolver delicados problemas financieros, ya que ella y su equipo habían elaborado un presupuesto de gastos basándose en una oferta de ayuda oficial por “un millardo de bolívares, suma que nunca llegó”, y eso la obligó a mover cielo y tierra para que al final el Estado le aprobara “un aporte por la suma de 600 millones de bolívares, cuando precisamente el presupuesto de gastos está sobre los 4,6 millardos de bolívares”. (Moreno-Uribe 2006)
Y así mismo fue anunciado en rueda de presa por el Ministro del Poder Popular para la Cultura:
Por ahora y para colaborar con la realización del XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas (XVI FITC 2006), del 31 de marzo al 16 de abril, el Ministerio de la Cultura aportará 600 millones de bolívares, más todo el apoyo logístico y publicitario que requiera, “el cual es un evento eminentemente privado, organizado por el Ateneo de Caracas y conducido por Carmen Ramia”.
Así lo anunciaron el ministro “Farruco” Sesto y la presidenta del Instituto de Artes Escénicas y Musicales (IAEM) Silvia Díaz Alvarado, en rueda de prensa realizada ayer en las instalaciones del ente cultural
(Moreno-Uribe, 2006)
Pero el XVI FITC no sólo recibió apoyo del Estado venezolano sino también de la empresa privada entre las cuales estuvieron: la CANTV, El Banco Mercantil, las gobernaciones de Miranda, Zulia, Sucre y Aragua, así como la ayuda de las Alcaldías de Caracas, Baruta, Chacao y Sucre; además de otras instituciones privadas y el apoyo de varias embajadas de más de una docena de los países participantes.
Es importante destacar que en la época de Carlos Giménez no se contaba con el apoyo económico por parte de la empresa privada, al respecto él manifestaba que:
El Estado venezolano no lo puede seguir haciendo solo, aun cuando lo apoyen los demás países. La empresa privada tiene que comprometerse, devolver en algo todo lo que ha ganado, todo lo que ha recibido del país y todos los que se hacen ricos en sistemas como éste, tiene que devolver algo(…) (Giménez Carlos, en entrevista realizada por Moreno-Uribe, 2003. p. 53)
Al parecer se ha notado un avance al respecto, ya que no sólo se destaca el aporte de la empresa privada, sino también de las diferentes gobernaciones de las cuales se destaca la del estado Miranda “contando con el aporte de 126 millones de Bolívares realizado por el gobernador del estado Miranda, Ingeniero Diosdado Cabello, quien a través del Instituto Mirandino de Cultura Imirc, lograron que la ciudad de Los Teques se convierta en sub sede de este importante evento artístico”. (Diario la Voz 2006)
Aún así, según declaraciones de la directora general del XVI FITC Carmen Ramia, el presupuesto quedaba pequeño para los costos de todo el evento:
Sin embargo, la dirigente de esta celebración bienal del teatro también reconoció que tuvieron muchos obstáculos, dificultades serias, como es el caso del aporte del Estado. "La suma que recibimos no fue la que se nos había indicado con antelación. Si hacemos una comparación entre el aporte percibido por otros festivales como el de Oriente y Occidente, constatamos una desigualdad evidente. La contribución que se hizo efectiva este año, una vez presupuestada, produjo un desbalance muy grande, con el cual no contábamos. Eso tuvo una repercusión". -¿Cómo se subsanará el problema? -El problema de esta diferencia económica será solventado, pues hemos pensado en eventos que suplan el vacío que quedó. La crisis ha sido atacada con programación, con planes. Trazamos una agenda de actividades. Traeremos cosas importantes, que serán anunciadas en su momento. (Alfonzo-Sierra Edgar 2006 p. 8B)
Una vez superados los obstáculos financieros, se dió inicio a la XVI edición del Festival Internacional de Teatro de Caracas, sinónimo de apertura a un intercambio cultural, en donde la Promoción y la Animación Cultural se integran, para dar vida a un evento que tiene a la Diversidad como protagonista.
1.2 Países participantes, características generales de algunas de las obras teatrales presentadas en el XVI FITC y sus aportes.
En la decimosexta edición de FITC se exhibieron montajes de 23 compañías internacionales provenientes de América, Europa, Asia y Oceanía junto a 18 montajes representantes del que hacer teatral y dancístico nacional venezolano.
Entre los países participantes estuvieron: Argentina, Australia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, España, Estados Unidos, una pieza en donde se unieron los países: Estados Unidos/Eslovenia, Francia, Israel, Italia y México, Irán, además de una rica selección de lo mejor del teatro Nacional.
El día Viernes 31 de marzo de 2006 a las ocho y treinta de la noche se dio inicio a una nueva edición del XVI FITC, con la obra Hedda Gabler de Alemania, esta pieza “fue la última obra que escribió el gran autor Noruego Henrik Ibsen” (revista del XVI FITC, pág. 13) en el año 1890, la compañía: Schaubühne am Lehniner Platz se ha dedicado al montaje de las obras de Ibsen, ya que “en su obra proclama la libertad del individuo… más que ningún otro escritor (…) nos ha forzado a reflexionar sobre nuestros derechos y valores fundamentales”,(Revista del XVI FITC pag.13) la cita fue en la sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño.
Las entradas para la inauguración fueron escasas para la cantidad de gente que quería ver la apertura del festival, la asistencia a este primer día de encuentro con el teatro internacional fue masiva, cosa que no cambió mucho durante el desarrollo de todo el evento, el cual en esta oportunidad fue dedicado a Alemania, se presentaron cuatro compañías de este país y una coproducción de Alemania/Irán, la asistencia del público a estas piezas fue importante.
Otras de las obras que se presentaron en el marco del XVI FITC fue IL Corso (El Corso) de la compañía Pan Optikum, esta pieza también representante de Alemania, debutó en Venezuela en el paseo los Próceres de la ciudad de Caracas, entra dentro de las obras que propuso el festival para presentarse en los espacios públicos y abiertos. La pieza causó gran interés en el público caraqueño ya que en cada una de las funciones tuvo una asistencia masiva de espectadores que hacían lo imposible por no perderse un evento al cual muy pocas veces se tiene acceso, debido a que el repertorio teatral venezolano carece de elementos de gran nivel de inversión, como monumentales escenografías, fuegos pirotécnicos, y dispositivos que permitían a la pieza ser vista gran cantidad de espectadores.
La obra Il Corso no sólo presentó actores sino también efectos pirotécnicos, acrobáticos, escenográficos y de iluminación que dejó sorprendido a más de un espectador, rompiendo el paradigma del teatro de calle que se produce en Venezuela. Todo ese conjunto de elementos se desarrollaron dentro de una trama, la cual está basada en el Libro de las preguntas de Pablo Neruda “El Libro contiene, (…) 316 preguntas que desconciertan al lector. Muchas de las preguntas hechas por Neruda, como las preguntas de un niño, quedan sin respuestas: ¿A dónde se retira la sombra? ¿Y por qué las hojas tienen que ser verdes?”(Revista del XVI FITC pág. 14)
Los organizadores del XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas hicieron lo posible por traer el mejor repertorio para Venezuela, ya que la compañía Pan Oktikum
Fundada en 1982, ha recibido premios como el principal galardón del World Festival de Atlanta (Estados Unidos), el primer premio del Festival Internacional de Teatro Callejero en Venecia y el reconocimiento para la producción Il corso, como la Mejor Gran Producción durante el Festival Internacional de Teatro Callejero en Holzminden, en la edición 2002. (El Nacional p.6 B 2006)
Toda la pieza está orientada en su totalidad al público, para la cual se diseñaron elementos especiales que en su conjunto produjeron una pieza de gran calidad:
Estas consideraciones son de suma importancia pues permiten estudiar las obras teatrales como parte de un evento: el XVI FITC, es así como se han referido algunas características relevantes de los montajes, ya que es relevante para poder establecer un análisis acertado en el área de Promoción Cultural.
Con la obra Il Corso se demuestra una de las razones del título de este capítulo: El XVI FITC un escenario de Diversidad Cultural:
Jóvenes, adultos, rubios, morenos, niños, niñas, en fin, el más diverso y plural de todos los públicos se dio cita frente a los monolitos para acudir al espectáculo Il Corso (El Círculo) de la compañía alemana Pan Optikum (…)
La magia del teatro nuevamente invadió Los Próceres y el público respondió con su asistencia -aproximadamente 2.000 personas- y posterior aplauso a la función número 90 de Il Corso en el mundo y la primera en Venezuela.
(Hidalgo, 2006 p. 8B)
El análisis detallado de cada una de las piezas es, sin duda alguna, un aporte importante para un estudiante de la Promoción Cultural, así como también es manejar el estudio de “lo cultural”, el cual integra una gran cantidad de elementos, la breve descripción de algunas obras teatrales se hace necesario para poder entender el papel de la Promoción y Animación Cultural en el XVI FITC como evento, y así mismo para analizar estas categorías en la práctica.
La obra teatral de Taiwán, titulada: “Sound of the ocean” (El sonido del Océano), “es una experiencia sensititiva de inspiración taoísta acerca del agua como nutrimento de nuestra vida y como un auténtico espectáculo para la vista y el oído”. (Revista XVI FITC, p. 56)
Esta pieza realizada por la compañía U Theatre “Investiga en las raíces más profundas de su cultura milenaria a partir de patrones percusivos y de expresión corporal” (Revista XVI FITC, p. 56).
Está basada en los sonidos del océano y en el ciclo de las corrientes fluviales en su recorrido hacia el mar y para su representación fue dividida en cinco movimientos muy bien diferenciados: "Colapso", "Corrientes de agua", "Las olas", "Escuchar el corazón del océano" y el "Sonido del océano". Los cinco minutos introductorios de "Colapso" sirvieron de preparación, con seis tambores de mediano tamaño y ocho grandes. Entonces, las delicadas cuerdas de una especie de koto iniciaron "Corrientes de agua", un movimiento creado por Wong tras muchas sesiones de contemplación y meditación en la India. Un grupo mixto de siete intérpretes con pequeños tambores, sentados en posición erguida, construyeron delicados y casi imperceptibles ritmos que se fueron tornando en intensos crescendos -asemejaban el continuo flujo y adaptabilidad del agua-, lo que finalizó con un diálogo entre varios instrumentos. Aunque éstos sonaron de forma continua, algunos intervalos fueron llenados con el primigenio sonido "om", el cual plena el universo según la cosmología budista. (Ballesta, Juan Carlos 2006 p. 10B.)
Otra pieza importante a mencionar es la obra de México, Las chicas del 3.5 Floopies de Luis Enrique Monasterio, esta obra es fiel representante del teatro latinoamericano, por la temática en la que se desenvuelve. Se trata de: “Dos viejas medio putas, medio yonquies, medio pendejas, medio tortilleras. Viejas que descubren que no significan nada como personajes, que son apenas un gesto vacío de sentido. Se suicidan pero no, porque siempre habrá otras dos viejas, (…) que ocupen su lugar, o ellas mismas repitiéndose en la nada” (Programa de mano, editado por fundateneofestival, de la obra de México).
Una obra teatral particular por su temática, pero normal en su puesta en escena, ya que careció de elementos novedosos en la escenografía, en el vestuario, es un montaje que acerca al público a una realidad latinoamericana presente en algunos países. Con toda seguridad en la producción teatral mexicana en general existen piezas de mayor calidad, y sobre todo, que dejen al espectador un mensaje importante, sin duda obras dignas de un Festival Internacional.
En contraste a esta obra encontramos la pieza representante del país Reino Unido, denominada “Túnel Visión” (Visión de Túnel), fue escenificada por títeres. Verdaderos maestros de las marionetas se encargaron de mostrar lo mejor de las emociones de los personajes tras mostrar este arte escenificado a través de la tecnología. La compañía teatral Faultyoptic “ha resquebrajado el concepto tradicional del arte de las marionetas al producir una entretenida mezcla de drama no verbal, imaginería surrealista, teatro mecanizado y el uso de objetos animados y proyecciones” (Programa de mano, editado por Fundateneofestiaval, obra de Reino Unido)
Así mismo, la obra teatral de Estados Unidos es I am my own wife (Yo soy mi propia esposa), un monólogo interpretado por Jefferson Mays, permitió a los espectadores, más allá de la trama y de las dificultades del espectador por entender el idioma o leer los subtítulos colocados en la sala, disfrutar de la excelente expresión corporal del actor. Una parte fundamental de la puesta en escena y de la trama que presenta esta pieza es la escenografía, elemento sumamente importante, la sala Anna Julia Rojas del Ateneo de Caracas cambio completamente al presentar a detalle el minimalismo con que fue estructurada cada elemento de la escenografía, permitiendo al público entender como lo diverso y lo complejo de los elementos escenográficos pueden ayudar a una buena comprensión de la obra. Se trata de
Charlotte von Mahlsdorf (Berlín, 1928 - Estocolmo, 2002), quien por ser mujer en el cuerpo de un hombre desde los años 20 en su país usó atuendos femeninos, vivió burlas, agresiones y persecuciones por parte de su padre (a quien mató en defensa propia a los 17 años), sus compañeros de escuela y una sociedad gobernada por nazis y comunistas. A todos ellos sobrevivió Charlotte, quien legó al estado de Berlín un museo creado por ella misma y en el que atesoró una importante colección de muebles y objetos de fines del siglo XIX, que pertenecieron a su familia (por esto recibió en 1992 la Cruz Federal del Mérito, equivalente a la Legión de Honor francesa).
(El Nacional p. 6B. 2006)
Este Museo es recreado de forma realista en la escenografía de la obra teatral ya que estaba compuesta por objetos reales, establecidos cada uno de ellos con cosas verdaderas, se podía observador radios, diversas piezas de decoración, entre muchas otras cosas, colocadas como fondo en donde se desarrollaba toda la acción de la representación, sin duda un gran desafío para los miembros de la agrupación quienes fueron los responsables del traslado de cada uno de estas piezas, es importante destacar que el equipo de producción siempre cuenta con el apoyo de los organizadores del festival, pero el esfuerzo sigue siendo grande.
Este montaje fue dirigido por Moisés Kaufman, venezolano cautivado por las artes escénicas, presenta un montaje con muchos detalles, y no sólo trae a Venezuela esta obra I am my own wife, sino que también fue ganador en el mes de Abril de 2008 del premio Harold and Mini Steinberg, otorgado por la Asociación Americana de Críticos de Teatro, por hacer la mejor obra nueva: 33 Variaciones, esta vez presenta su faceta como dramaturgo.
Cuba, presentó una obra titulada: Vida y Muerte de Pier Paolo Pasolini, de Michel Azama, un teatro enmarcado en la época de los años 70, con un montaje sencillo identifica la forma de vida del pueblo Cubano. El teatro de Cuba, tiene propuestas innovadoras que seguramente superan en calidad a esta pieza, aunque la misma cuenta con elementos de importancia, el Festival internacional de Teatro siempre trata de recibir obras de la mayor calidad, sin embargo hay que tomar en cuenta que cada una de estas piezas representa las particularidades de cada una de los países que se representan.
Las diferencias de las obras teatrales presentadas en éste evento se evidencian no sólo en la variedad de países sino también en la calidad escénica, escenográfica y sobre todo del uso de elementos tecnológicos. La escogencia de las obras por parte de los organizadores del festival juega un papel fundamental, porque de allí se deriva la relación de los espectadores con los organizadores del evento.
Al ser Alemania el país invitado especialmente, es preciso describir una de las obras más particulares del XVI FITC se trata de: Letters from Tentland, Dance under Cover”: (Cartas desde la Tierra de las tiendas. Danza encubierta) de Helena Walmann. Esta propuesta es bastante interesante para el público venezolano, en especial para la audiencia femenina del festival, ya que la misma es una co-producción de Alemania/Irán, y se trata de la vida de las mujeres en dicho país, y de cómo en su mayoría las féminas son reprimidas.
“Carta desde la Tierra de las Tiendas es la primera producción realizada por una coreógrafa occidental en el Irán contemporáneo y después de su estreno en Teherán y en el Festival de teatro de Fadjr de tierras persas, ha sido mostrada a nivel internacional con gran receptividad por parte del público y la crítica. Seis actrices Iraníes enfundadas en pequeñas y coloridas tiendas como las que se pueden ver en la nación musulmana, le cuentan a los espectadores sus tristezas y alegrías en una vida que se haya entre la invisibilidad exterior y la libertad interior en lo que se podría llamar un “teatro del tschador” (Programa de mano de la obra teatral, de Alemania/Irán, editado por fundateneofestival)
Esta obra también se presentó en la sala Anna Julia Rojas del Ateneo de Caracas y una vez finalizada la presentación las actrices invitaron a las damas del público al escenario, a tomar un té y a conversar sobre cómo es la vida en Irán, superando las dificultades del lenguaje, se pudo entender la vida difícil que viven estas mujeres.
Entre las obras de teatro de calle se encuentra la obra Red de Australia, una propuesta completamente abstracta, simplemente no es una pieza tradicional, incluso la posición de algunos espectadores (según lo observado) fue de desconcierto y de falta de comprensión, otros ni siquiera entendieron la trama sólo interpretaron la propuesta como una muestra de acrobacia más. Aunque más allá de algunas de las expresiones que se pudieron apreciar de parte de la audiencia se pudo observar que esta pieza representa la vanguardia teatral que el público venezolano en general no está acostumbrado.
Es importante destacar, que los espectadores con referencia teatral, pudieron apreciar que la obra Red entra dentro de las últimas tendencias de las artes escénicas en donde la acrobacia, el monumentalismo de los dispositivos y la iluminación juegan un papel fundamental. Pero para aquellos espectadores que no son frecuentes sus visitas al teatro, les resultó bastante difícil comprender la obra. En este punto se intenta dar algunas características de la posición del público en general, respetando siempre las particularidades que pueden existir.
La obra Red del grupo teatral Stalker Theatre Company de Australia contempla un grupo de actores que intentan describir la trama de la obra realizando acrobacias en dispositivos especiales (una especie de zancos movibles). La coreografía de los actores marca una pauta definitiva en la pieza. Es una historia futurista que habla sobre el fin del mundo gracias a un sol gigante y rojo.
A diferencia de la pieza de Australia se encuentra la obra teatral de España: Las que Faltaban, interpretada por la actriz Antonia San Juan, se trata de once Monólogos a cargo de la misma actriz, la particularidad de la pieza radica en la caracterización de cada uno de los personajes, los cuales se encuentra completamente delimitados y realmente parece una persona distinta en cada interpretación, todo el monólogo fué desarrollado con una excelente calidad de actuación y los espectadores quedaron gratamente impresionados, a pesar de que lamentablemente esta actriz y su equipo fueron atacados por el hampa: apenas salieron del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, fue despojada de todo su equipaje donde precisamente llevaba los elementos de vestuario y accesorios que utilizaría para la obra.
La intérprete, al final de una de las presentaciones dijo: "Es la sala más grande donde he actuado", refiriéndose al Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela, que para algunos es la mejor sala con que cuenta este país, no sólo por la cantidad de público que es capaz de albergar, su diseño, y las nubes de Alexander Calder, sino por ser el sitio académico por excelencia en donde se mezclan arte y funcionalidad, escenario perfecto para un encuentro teatral internacional el XVI FITC.
La obra Pouquoi la Cusine? (¿Por qué la Cocina?) de Francia, mostró innovaciones en la escenografía, puesta en escena, utilización de recursos tecnológicos, y sobre todo, se destaca por las excelentes actuaciones, ya que esta muestra teatral no utiliza el lenguaje hablado como forma de comunicación, sólo utilizó el cuerpo y las imágenes proyectadas en la escenografía para transmitir los mensajes al espectador.
La pieza se trataba de las vivencias que cotidianamente pueden suceder en la cocina; que son muchas, a través de la obra se puede establecer que relación tienen las diversas sociedades con su cocina, sin duda, un lugar importante en el desenvolvimiento de un hogar.
¿Por qué la cocina?, se preguntan los actores de Theatre Tatto cuando acceden al escenario y todavía no son del todo personajes. Y se responden que en ella suceden las cosas importantes que nos afectan, que esa estancia de la casa es el autentico teatro de la vida cotidiana. Van más allá, incluso. La cocina que nos muestran, su cocina es, dicen, un reflejo, de la vida en Europa, de lo que hoy en día ocurre en el viejo continente, en el que sus habitantes pasan más tiempo fuera que dentro de sus casas, en el que la vida pública se ha impuesto a la privada”(López Mozo, Jerónimo.2006. p. 47)
Es precisamente este “reflejo de la vida en Europa” lo que cautiva a los espectadores venezolanos, además de la trama y el ritmo alto de la pieza que permite mantener la expectativa durante todo el desarrollo de la obra, sus fragmentos cortos y su posibilidad de colocar muchas cosas en la imaginación del público, hace posible la percepción de los detalles de la escenografía múltiple y de la iluminación, estudiada a detalle para crear atmósferas importantes en el desenvolvimiento de la trama.
El repertorio venezolano del XVI FITC estuvo compuesto por 19 agrupaciones provenientes de la ciudad capital y algunas del interior del país, la selección deéstas piezas estuvo a cargo de una comisión integrada por: Omar Gonzalo, Teresa Alvarenga, Nelly Garzón, Gerardo Piñeiro y Miriam Dembo.
Las representaciones teatrales venezolanas fueron menor que la cantidad de obras extranjeras, la selección fue definitivamente muy variada, las agrupaciones venezolanas que participaron son las siguientes: Caravana Danza Teatro, Centro de Creación Artística TET, Compañía Regional de Teatro de Portuguesa, Danzata, Fundación Galpón de San Fidel Laboratorio de investigación Teatral, Teatro Tilingo, Fundación Rajatabla, el Grupo Bagazos, Dramo, Grupo teatral Skena, Teatro de Títeres Naku, Río Teatro Caribe, el Grupo Theja, el Teatro San Martín, Teatro de repertorio latinoamericano-Teatrela, Teatro del Contrajuego, Xiomara Moreno producciones.
Las obras nacionales fueron escogidas por bastantes espectadores en el marco del festival, incluso se puede afirmar que en mayor cantidad que la esperada generalmente en épocas normales (en las que no hay festival), sin embargo no se pueden comparar con la gran afluencia de gente que asiste a las obras internacionales, el público definitivamente las prefiere.
De las obras observadas se pudo apreciar una gran calidad escénica y de desarrollo actoral, es el caso de la Obra Café Inmigrantes de la compañía Dramo, donde se integraron elementos de danza y manejo del escenario bastante creativos y lúdicos.
1.3 La respuesta del caraqueño ante las obras del XVI Festival
El Festival Internacional de Teatro de Caracas tiene un puesto definitivo en el público caraqueño, está demostrado por la enorme afluencia de gente solicitando las entradas con mucho tiempo de anticipación, incluso hay personas que no tienen entradas pero se acercan a las afueras de la función para esperar, a ver si queda un puesto desocupado, fue el caso especifico del XVI FITC, aunque según expertos en la materia se dieron casos de festivales que estuvieron bajo la dirección de Carmen Ramia, en donde los puestos quedaban vacíos y había mucho público esperando en las afueras. En el XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas no se produjo ese caso, en las pocas obras que no se habían vendido la totalidad de las entradas se dio acceso al público el cual esperaba en las afueras, y en su mayoría eran estudiantes de teatro y público asiduo a las artes escénicas.
En la época de Carlos Giménez era una regla de oro pasar a la función al público que ya tenía las entradas, y luego se daba sala a las personas que no tenían boletos comprados, era una verdadera forma de democratizar el festival, hecho con la intención de no dejar puestos vacíos y más cantidad de personas tuvieran acceso a la función. Además, qué mayor satisfacción para los grupos extranjeros invitados al ver la sala llena en todas las presentaciones.
Describiendo a detalle y con más especificidad el caso del XVI FITC, se pueden citar varios ejemplos emblemáticos de la posición del público, el primero es el caso de la presentación de la Obra “Las que Faltaban” interpretada por la actriz Antonia San Juan, esta obra se presentó en el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela, el público realmente abarrotó la sala, la cual tiene una capacidad de más de dos mil butacas. En ésta oportunidad se pudo observar directamente que el público era completamente plural y de todas las edades.
Otro ejemplo importante a destacar es la obra de teatro de Francia: Pourquoi la Cusine? De la agrupación Théatre Tatto, dirigida por Mladen Materia y Meter Handke, toda la sala Anna Julia Rojas del Ateneo estuvo completamente llena en todas las funciones, sin duda fue una de las piezas favoritas del festival.
Al observar con cuidado cómo es el desenvolvimiento del público caraqueño fuera del Festival, cuando en la ciudad sólo se presenta el elenco nacional; quienes continuamente presentan sus piezas, se puede notar que el público no asiste de la misma manera, no se da en ningún caso la avalancha de gente que se observa en el festival, ¿Por qué sucede este fenómeno? ¿Es que acaso el público caraqueño no valora el talento nacional? En este sentido fueron consultados algunos expertos teatrales quienes manifestaron su preocupación al respecto. La mayoría de las personas entrevistadas manifestaron la necesidad de crear un público asiduo al teatro nacional porque lamentablemente con este festival se promueve (en su mayoría) sólo el teatro internacional. Aunque las compañías nacionales han participado en las últimas ediciones de este evento, definitivamente la representación teatral venezolana no tiene la misma acogida del público.
Al respecto el Profesor Orlando Rodríguez, manifiesto lo siguiente:
(…)un festival más, numero XVI en un total de 33 años, mientras los festivales nacionales no han pasado de 8 desde el año 1959, quiere decir que en 48 años a habido 8 festivales nacionales, y en 33 años, 16 festivales internacionales, eso indica un desprecio total por lo nacional, pensando que lo internacional le da a la ciudad el adjetivo de capital del teatro, es mentira eso de Capital del Teatro, simplemente es un lugar más que tiene el merito de presentar obras internacionales para que los que somos del público, podamos ver esas innovaciones y esos aportes de las grandes compañías, pero de ahí, a decir, Capital del Teatro. ¡Eso es un disparate! (Rodríguez Orlando, en entrevista realizada por Mariela Hernández)
Según esta apreciación, no es solamente el público quien no asiste a las obras nacionales, son algunos de los venezolanos en general quienes no reconocen el esfuerzo y el valor de las artes escénicas realizadas en este país. Sin entrar en juicios de valor, es importante saber que en la medida en que se conozca y se acepte el talento venezolano, se mejorará la calidad de las producciones realizadas porque tendrán más apoyo y conocimiento de parte de los espectadores.
Definitivamente algunos venezolanos le dan más importancia a lo internacional, y de eso no se escapa el teatro, ni el caso del Festival, al respecto el Profesor Luis Chesney manifiesta que la importancia que le dan los caraqueños a este evento es:
Mucha, es decir el caraqueño es “festivalero”, hay un público de festival, pero ese público que es masivo, que llena todos los teatros, después cuando pasa el festival y siguen las obras nacionales, no asiste al teatro, es como lo de la copa América, [el público] tiene el sentido de querer venir a ver cosas buenas, novedosas, piensan que lo que viene tiene un nivel, y que es mejor que lo que se da aquí en Caracas, entonces es un visión de la gente festivalera, “vamos a ver porque ahí viene cosas buenas ¿y lo que se da en Caracas? Ah, no se (Luis Chesney, en entrevista realizada por Mariela Hernández)
La posición del público en esta investigación juega un papel fundamental, pues gracias a ella se puede ver cuál fue la aceptación del espectador hacia el festival, y así evaluar si efectivamente este evento puede enmarcarse dentro de la Promoción y/o Animación Cultural.
Al respecto el maestro Humberto Orsini, manifestó:
Los festivales tenían como finalidad mostrar experiencias de otros países, y el país receptor tenía que absorber toda la conducta y el mejoramiento de las técnicas teatrales del país, ahora, que conclusión saco yo: primero creó un público para el festival, y no un público para el teatro venezolano, los venezolanos no van a ver teatro venezolano, preferían ver el teatro extranjero, por que es lógico que si hay una cartelera atractiva internacional, vayan a ver una obra que dan aquí. Se creó un público del festival, durante el festival, y la gente se mata por ir al festival. Se acaba el festival, y se acabó el publico”. (Orsini Humberto, en Entrevista realizada por Mariela Hernández)
La asistencia por parte de los espectadores a las funciones de teatro nacional, fue importante, incluso mucho más de la que generalmente asiste a la escena nacional, fuera del marco del festival, pero nunca se puede comparar con el fenómeno que sucede dentro del FITC, es una verdadera avalancha de personas solicitando entradas y acceso a las obras, es un recibimiento a la novedad, este movimiento es legado de Carlos Giménez; los primeros festivales, especialmente los primeros cuatro, fueron de una calidad escénica sobresaliente, generando un público cautivo, que a pesar de la situación actual del país, aún sigue esperando la próxima edición del FITC. Se espera que el público no se quede esperando, y se puedan seguir contando con más ediciones del festival.
Un aspecto de especial importancia dentro del análisis del XVI FITC, es el teatro de calle, porque tiene la oportunidad de llegar a una mayor cantidad de espectadores, una mayoría que muy pocas veces es lograda por el teatro desarrollado en Venezuela en estos tiempos.
Por lo tanto se habla del teatro de calle como un medio de comunicación de masas, en donde se hace posible destacar los elementos que están presentes en el XVI FITC.
1.4 El teatro de calle, un medio de comunicación masas
Comunicación y Cultura: o para pensar lo Massmediático. Se trata de pensar esa relación, cada día más conjugada al punto de confundirse y no saber en ciertos momentos (por no decir siempre), quién es quién, de manera diferente. Pensarla de una "nueva manera", porque en estos días que corren son de tal magnitud los cambios culturales que se han producido, y que se están dando, que ya no podemos seguir con la nostalgia de cuando lo real, como dice Baudrillard, ya no es lo que era.
Nuestra hipótesis, por demás obvia dentro de la mirada más próxima y alejada de todo resquicio perjudicial, es que la configuración actual de los imaginarios de vida pasa necesariamente por la llamada cultura de masas. Entonces, si queremos entender cómo se construyen / reconstruyen los modos de vivir, de percibir y de reconocerse en estos tiempos, hay que empezar por clarificar la presencia de una sociedad de masas que se hace dominante en todos los signos que ella ofrece como referentes. Al punto que la gente, como sujetos sociales, está cada vez más determinada por la cultura que desde allí se desprende y constituye, por lo tanto, una manera distinta de vivir la existencia” (Bisbal, Marcelino 2007)
El teatro de calle en Venezuela, o más específicamente en Caracas es un arte que aún tiene mucho camino por desarrollar, el caso específico del XVI FITC es un ejemplo muy significativo, pues se trata de piezas teatrales con la capacidad de llegar a gran cantidad de público, convirtiéndose en un medio de comunicación de masas, el festival se convierte en una nueva manera de comprender la vida, y las distintas formas de comportamiento que en él se representan.
En la actualidad las palabras Comunicación y Cultura se disipan constantemente, se confunden, pues en estos tiempos actuales ya forman parten de un mismo concepto, de un mismo “sistema” que muestra lo dinámico de las sociedades contemporáneas, es importante clarificar la presencia de una sociedad de masas en éste país, y sobre todo, como a partir de estas se “construyen y reconstruyen los modos de vivir” es decir, de como se refleja en la Cultura y en elementos la integran, como en el Teatro de Calle traído a nuestro país por el Festival Internacional de Teatro.
Porque precisamente uno de los detalles más importantes de los espectáculos producidos en el XVI FITC es el teatro de calle, las obras teatrales más esperadas por el público son especialmente las realizadas en espacios no convencionales, entre otras cosas porque desde el surgimiento del festival han venido a Venezuela producciones nunca antes vistas en este país, innovaciones que no se escapan de los ojos del público.
El público pide más calle, es de esperarse que el teatro de calle adquiera mayor relevancia en un país en el que ha mermado el poder adquisitivo y en el que el consumo cultural "de butaca" se reduce a un público bastante específico y diferenciado, extraño, incluso, para las clases socioeconómicas de mayor privilegio. Si para algo ha servido el Festival Internacional de Teatro de Caracas en sus 16 ediciones es, precisamente, para acercar a un público totalmente ajeno a las tablas, que es atrapado y sensibilizado por las artes escénicas. Ello se ha traducido en el cultivo de una audiencia cada vez más fiel y numerosa que apuesta progresivamente por una Semana Santa teatral en Caracas, y que pudo verse nuevamente en los distintos espacios escogidos para esta edición (Hidalgo, Valentina 2006 p.8)
Todas las obras teatrales que se hicieron en espacios abiertos tuvieron una aceptación muy importante de parte del público, pero es necesario destacar la obra Il Corso, de la compañía Pam Optikum, propuesta presentada por Alemania, en el patio del paseo los Próceres, esta pieza fue fundamental en la realización del festival pues presentó elementos nunca antes vistos en producciones venezolanas.
Es importante tener en cuenta que el teatro es un medio de comunicación, y las artes escénicas siempre han tenido como premisa fundamental la comunicación de un mensaje trasmitido al público para hacer un efecto en él, si esta condición no se da, simplemente no hay teatro. Pero ¿Qué fenómeno especial sucede en las obras de calle presentadas dentro del XVI Festival internacional de Teatro? Para dar respuesta a ésta interrogante es necesario saber que estas obras tienen elementos escénicos tales como escenografía, vestuario, música, fuegos artificiales y zancos que permiten la comunicación a grandes números de personas abarcando espacios abiertos, como la concha acústica de Bello Monte y el Patio de desfile del Paseo los Próceres, en el caso especifico del XVI FITC.
Por lo tanto, una gran cantidad de venezolanos tienen acceso a obras teatrales de otros países, él publico de la ciudad de Caracas tiene posibilidad de observar manifestaciones artísticas de otras partes del mundo, en consecuencia, a la cultura de otras latitudes, desconocidas por muchos, como es el caso de países como Taiwán, quien presentó un espectáculo musical y teatral que pudo llevar al venezolano una muestra de ésta cultura.
Este tipo de teatro de calle se equipara entonces, por su amplio espectro, con los medios de comunicación de masas, como el periódico o la radio, aunque nunca podrá llegar a tantas personas como los que llegan en estos medios, en una menor medida estas obras llegan a un número incalculable de espectadores, incluso cuando en algunas ediciones del festival se presentan en ciudades del interior del país, el número de espectadores se multiplica, “La radio, la televisión y los periódicos se han convertido en componente de una explosión y multiplicación generalizada de Weltanschuungen: de visiones de mundo. (Vattimo. 1998 p. 79).
Efectivamente los medios de comunicación social en general han aumentado las distintas visiones del mundo, son muchas las maneras de interpretar la realidad, y quizás ese es el éxito del Festival Internacional de Teatro, el cual ha mostrado las distintas visiones del mundo a través de los diferentes montajes teatrales de varias partes del planeta, en todo caso, esa es una condición general de cualquier Festival Internacional de Teatro, pero en esta oportunidad es importante describir como se da este fenómeno en el público caraqueño, qué beneficios presenta para el teatro venezolano, y sobre todo es importante conocer que características pueden enmarcar este evento dentro de los modelos de Promoción y Animación Cultural.
Para el teatro venezolano los festivales siempre han sido una puerta para el conocimiento de nuevas tendencias teatrales, sobre todo, los primeros festivales producidos bajo la tutela de Carlos Giménez, en el caso especial del XVI FITC, las nuevas generaciones de actores, actrices y todo tipo de profesionales de las artes escénicas tuvieron la oportunidad de encontrar y ver algo completamente distinto y se pudo establecer un punto de comparación con el trabajo realizado en Venezuela, el cual tiene sus características propias y diferentes.
En este sentido, es importante mencionar que de acuerdo a la opinión de muchos críticos, no todas las piezas teatrales mostradas fueron de calidad, por ejemplo las piezas de los países latinoamericanos no fueron precisamente las mejores, según la opinión de especialistas en el área, como por ejemplo el Profesor Orlando Rodríguez, quien manifiesta que el error fue de la selección de las piezas participantes, pues algunas no eran de la envergadura suficiente para venir a un festival. La calidad de las obras permite dar la oportunidad de ofrecer un punto de comparación para el público venezolano, pero especialmente para los espectadores con un criterio teatral desarrollado, pues se pueden establecer elementos de análisis que permitan entender y comprender el valor del teatro venezolano.
Gracias al XVI FITC “el encuentro con otros mundos y formas de vida es quizá menos imaginario” como bien lo dice Vattimo y una de las formas de enfrentarse con esa realidad, aparte de los medios de comunicación, es reencontrándose con el arte y con todo lo que tenga que ver con la expresión del ser humano, bien sea directamente o a través de un medio de comunicación masiva.
Cuando se habla de los modelos de Promoción y Animación Cultural se habla de modelos comunicativos, porque ambos tienen que ver directamente con la manera en cómo comunican la acción cultural. En el caso especial del teatro de calle, muchas personas podrían pensar que entra en el modelo de Animación Cultural porque es totalmente recíproca la relación que se da con el público, es una comunicación bidireccional, en muchos casos la obra se modifica y actúa según sea la reacción del público. Pero para el presente análisis el hecho que dentro del XVI FITC como evento, se encuentre una obra en la cual ya se produzca un rasgo de Animación Cultural, ya es un elemento significativo porque permite la integración de ambos conceptos en un mismo evento. Aunque este se produzca de forma espontánea entre los espectadores y el público
Esa es verdaderamente una condición del teatro de calle, como bien lo explicó el Prof. Orlando Rodríguez, manifestando que el teatro producido en espacios no convencionales debe tener la particularidad de generar un feed back entre los actores y el público, es decir, se debe establecer una relación comunicativa especial y la obra debe modificarse según la reacción de los espectadores.
El Teatro de calle venezolano, todavía no tiene el suficiente empuje, ni el avance necesario para ser un medio de comunicación de masas, aún le falta utilizar elementos escenográficos de gran envergadura, y para eso es totalmente necesario el patrocinio del estado venezolano. Es importante aclarar que el teatro producido en Venezuela, si es un medio de comunicación, pero aún le falta afinar detalles escenográficos y de producción para que el mismo sea llevado a una gran cantidad de personas en una misma función, como sucede en el caso del XVI FITC.
Mientras se lucha porque el teatro de calle de Venezuela se fortalezca, es importante para los espectadores de todo el país seguir contando con una próxima edición del Festival Internacional de teatro de Caracas.
En este sentido es importante afirmar que según palabras de los organizadores del festival, la XVII edición del Festival Internacional de Teatro, que correspondía efectuarse en el 2008 no se llevará a cabo por problemas con la infraestructura física del Ateneo de Caracas y por razones presupuestarias. Así fue afirmado en rueda de prensa, aunque no es primera vez que este evento tiene serias dificultades, en esta oportunidad se ve fuertemente amenazado con desfallecer. Convirtiéndose el XVI FITC en la última edición del evento creado por Carlos Giménez en el año 1973, y que con 16 ediciones a permitido sensibilizar a la audiencia capitalina sobre la importancia del desarrollo artístico de la ciudad.
Así mismo, en la inauguración de esta edición, la directora general de Fundateneofestival Carmen Ramia adelanto su interés por continuar con su labor manifestando:
En treinta y tres años, dieciséis veces nos hemos encontrado para abrazarnos alrededor de un arte que nos habla de la vida, del destino de hombres y mujeres, y también de la irrenunciable voluntad de los artistas por reunirse con el público. Casi dos mil espectáculos distintos, centenares de miles de funciones, millones de personas congregadas ante la maravilla que nos han prodigado tanto grupos venezolanos como otros provenientes de casi cien países", añadió. "Que nadie lo olvide: este festival de teatro ha regresado siempre, una y otra vez, y sorteado los más diversos o inéditos obstáculos. Atizado por un profundo sentido de su responsabilidad pública, incluso cuando las cosas han llegado al extremo de doblegar el ánimo del país, estas sillas y estas tablas han abierto sus brazos a los ciudadanos para decirles que la vida sigue su rumbo, el teatro siempre vuelve para dar fe de ello". Ramia fue enfática en ciertos momentos. "Óiganme bien: No se ha acabado el Festival Internacional de Teatro ni se acabará. Y regresará, una y otra vez, por una razón que es sustantiva: porque el festival es una institución realmente pública, un servicio que se presta a un colectivo en permanente crecimiento, posible gracias a la sensibilidad, la comprensión y a la confianza que invierten personas, empresas y entidades gubernamentales, de Venezuela y de otras partes del mundo. (Alfonzo-Sierra, Edgar. 2006 p. 1C)
De la misma manera muchos estudiantes de las distintas disciplinas artísticas esperan seguir aprendiendo de más ediciones del festival, para el año 2008 no se podrá disfrutar de este evento, pero se espera con certeza que en un futuro próximo se pueda seguir contando con una siguiente edición del Festival Internacional de Teatro.
1.5 La Diversidad Cultural presente en el XVI FITC
"Hay un estudio espléndido de un gran cabaret de Río, en el que durante muchos años convivieron las tres culturas, En el patio de atrás, donde estaban los esclavos, se bailaba la música negra; en las salas de entrada se bailaba música brasileña ligada a las transformaciones de los ritmos coloniales y en el salón se bailaba vals. En algún momento las paredes y los biombos se resquebrajaron, la samba invadió el espacio colonial, el espacio de la aristocracia de Río y fecundó todas esas músicas del norte. No se quedaron solamente en la fecundación de las músicas coloniales, fueron capaces de partir el bossanova: un hijo que le hicieron al jazz norteamericano.
Jesús Martín Barbero, 1994
Según el autor se puede ejemplificar con claridad como ha sido la posición de la Diversidad Cultural producida en Venezuela gracias al XVI FITC, ya que en este caso el país se convierte en ese gran “cabaret de río en el que por mucho años convivieron las tres culturas”, el festival no sólo comparte las tres culturas, sino una diversidad enorme de ellas la cuales se reflejan en las artes escénicas. La importancia sigue siendo mucha, el hecho de poder ver la escena internacional, convierte a los venezolanos en jueces de su propia producción escénica, permitiendo que ellos mismos puedan ver la calidad del teatro producido en suelo venezolano. Porque en el supuesto de que las compañías presentadas sean malas, el espectador podrá establecer contacto con ellas permitiendo formar una comparación exacta directa y concreta.
Centrando el objetivo de la presente investigación es importante conocer que la diversidad cultural es un elemento presente, y que interviene en la formación de los espectadores.
La declaración Universal de UNESCO (2001) sobre diversidad Cultural establece una serie de elementos que son importantes de considerar a la hora de entender cuál es la importancia real del desarrollo de un festival teatral de esta envergadura en suelo venezolano.
El artículo 1 manifiesta: La cultura adquiere formas diversas a través del tiempo y del espacio. Esta diversidad se manifiesta en la originalidad y la pluralidad de las identidades que caracterizan los grupos y las sociedades que componen la humanidad. Fuente de intercambios, de innovación y de creatividad, la diversidad cultural es, para el género humano, tan necesaria como la diversidad biológica para los organismos vivos. En este sentido, constituye el patrimonio común de la humanidad y debe ser reconocida y consolidada en beneficio de las generaciones presentes y futuras. (Declaración universal de la UNESCO sobre Diversidad Cultural).
De acuerdo con esta declaración, se puede observar la importancia del desarrollo de la diversidad cultural para las sociedades, El XVI FITC permite ejercer pluralidad, no en vano se pueden apreciar trabajos escénicos de países tan distantes. El Teatro como forma de representación artística en su esencia, representa el país donde se desarrolla o nace, es un reflejo de cada una de las sociedades, y esa realidad no escapa del XVI FITC. Esta diversidad como bien se manifiesta en éste artículo “constituye el patrimonio común de la humanidad”.
Art. 6 Hacia una diversidad cultural accesible a todos Al tiempo que se garantiza la libre circulación de las ideas mediante la palabra y la imagen, hay que procurar que todas las culturas puedan expresarse y darse a conocer. La libertad de expresión, el pluralismo de los medios de comunicación, el multilingüismo, la igualdad de acceso a las expresiones artísticas, al saber científico y tecnológico –comprendida su forma electrónica– y la posibilidad, para todas las culturas, de estar presentes en los medios de expresión y de difusión, son los garantes de la diversidad cultural. (Declaración universal de la UNESCO sobre Diversidad Cultural)
El XVI Festival Internacional de Teatro de Caracas es un garante de la Diversidad Cultural, a través de él, los venezolanos así como los actores y el equipo de producción que participa con las compañías invitadas, pueden entablar un diálogo artístico y personal, cada una de estas culturas pueden expresarse y darse a conocer,no sólo a través de sus trabajos escénicos sino también a través del encuentro físico que pueden hacer con el público y hasta con los mismos organizadores del evento.
Como puede apreciarse, este festival también ofrece igualdad de acceso a las expresiones artísticas (como se manifiesta en el artículo 6) pues siempre los organizadores tratan en la medida posible que la mayor cantidad de personas puedan disfrutar de los espectáculos, incluso cuando se cobra la entrada se hace por un costo mínimo y en la mayoría de los casos no cubre los gastos para movilizar a una compañía teatral, con toda la escenografía y utilería requerida para un montaje. Incluso el teatro de calle realizado en espacios lo suficientemente grande para albergar a gran cantidad de público, es el más costoso, ya que necesita de elementos escenográficos de gran tamaño y en algunos casos de fuegos pirotécnicos, aún así, con todos los esfuerzos realizados para conseguir el dinero, estos espectáculos, son completamente gratuitos y presentados a muchas personas.
Art. 11 Establecer relaciones de asociación entre el sector público, el sector privado y la sociedad civil. Las fuerzas del mercado por sí solas no pueden garantizar la preservación y promoción de la diversidad cultural, condición de un desarrollo humano sostenible. Desde este punto de vista, conviene fortalecer la función primordial de las políticas públicas, en asociación con el sector privado y la sociedad civil (…) Declaración universal de la UNESCO sobre Diversidad Cultural.
En lo que respecta a la obtención de los fondos para cubrir todos los gastos generados por el XVI FITC se obtuvieron recursos tanto de la empresa privada, como por parte del Estado quien a través del Ministerio del Poder Popular para la Cultura ofreció un aporte necesario. Sin embargo los esfuerzos aún deben ser mayores para que entre varios sectores puedan apoyar iniciativas de este tipo.
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