Yo soy

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jueves, 23 de junio de 2011

Morir, matar y divertirse...¿Cómo saldrá mi psiquis si salgo vivo de esta masacre-sobrevivencia-impotencia-dolor- siendo además engañado por mi compadre delincuente de cuello rojo y yo inocente pagando cana?






Morir, matar y divertirse
Lo novedoso y atroz... y es la moda a utilizar, es morir y matar como espectáculo miedoso
LUIS JOSÉ UZCÁTEGUI |  EL UNIVERSAL
jueves 23 de junio de 2011  12:00 AM
La fatalidad y la trasgresión atraen y llaman más la atención que lo bueno y lo correcto. A pesar que se quisiera que no fuera así, es una realidad inmemorable y, además, tiene una explicación lógica, si se sabe procesar esta predilección cognitiva por el mal se convierte en elemento de utilidad social. Es imposible no dirigir la atención con sentido de prioridad hacia la desgracia, ya que lo que le da presencia en la mente a lo negativo y trágico es el miedo, y el miedo es la emoción primigenia del humano en la cual sustenta su existencia.

Miedo siente todo ser vivo ante la adversidad, lo desconocido, el silencio inexplicable y ante ese accionar que se convierte en ruidos atronadores cuando decenas de ciudadanos protestan todos los días por comida, vivienda, trabajo, salud, dignidad, justicia y el derecho a no ser asesinados como ratas descarriadas. No es necesario que la desventura llegue a través de hecatombes naturales, deslaves humanos motivados por la ineficiencia oficial o el ajusticiamientos en masa como está sucediendo en los infiernos distantes de Libia y Siria o los más cercanos las cárceles de El Rodeo I y II en Venezuela. Basta que aparezca un estímulo peligroso o macabro para que el miedo genere alerta, lo cual si no se utiliza para pensar y generar soluciones, normas, leyes y verdades, entonces el miedo se convierte en fuente de letalidad. El miedo trasforma al pobre en miserable, al mentiroso en cobarde, al insulso en desgraciado, al mediocre en canalla, al hipócrita en lacayo y al ignorante en occiso ambulante.

Sin embargo, no es lo peor, en todas las épocas el efecto del miedo utilizado para bien o para mal ha sido percibido y someramente descrito. Lo novedoso y atroz, lo cual ha cundido en todos los países, y es la moda a utilizar, es morir y matar como espec-táculo miedoso que sirve para vender periódicos, tener rating, distraer políticamente a los habitantes y consumar el acto cruel y salvaje de seguir manejando el miedo como herramienta de dominación. Algo así como encerrar a millones de ciudadanos en una jaula que se llama Venezuela, para ser azotados con el terror y esclavizados con los caprichos de un presidente a quien le es muy revolucionario divertirse viendo, desde el confort de una isla lejana junto a sus amigotes, morir y matar.

@LuisJUzcategui

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