Violencia | Ingresaron once cuerpos a la morgue de Bello Monte entre jueves y viernes
A joven lo arrollaron y luego le dispararon en la cabeza
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Deudos de Jerry Godoy Andrade exigieron que se haga justicia en el caso del muchacho (Fernando Sánchez)
MARÍA ISOLIETT IGLESIAS | EL UNIVERSAL
sábado 24 de septiembre de 2011 12:00 AM
El carro le pasó por encima dos veces. Después, el conductor se estacionó y del auto -cuyas características nadie supo detallar- se bajaron varios hombres y uno le disparó directo a la cabeza. Luego huyeron.
Jerry Andrés Godoy Andrade, de 28 años, murió en el sitio donde lo atacaron. Quedó sin vida en una calle que está por la parte de atrás de la Clínica Loira en El Paraíso, este viernes, a las 3:10 de la mañana aproximadamente.
Los amigos que iban con él fueron los que avisaron a la familia. Ellos le contaron a su tía, Carmen Andrade, que todo había pasado por un mal entendido que se generó en una discoteca donde habían pasado parte de la noche.
Al parecer, relató la mujer, la novia del asesino comenzó a coquetear con Jerry. El hombre, al darse cuenta, reclamó. Después de amenazar a Jerry le dijo que no lo quería ver más por la discoteca que está en el Centro Comercial Galerías El Paraíso. Jerry, según los amigos, trató de mediar. No quería problemas, así que decidió irse.
Afuera, intentaron abordar un taxi. El conductor no quería hacerles la carrera hasta San Martín porque se dio cuenta del problema que tenían con los otros jóvenes. Pero lo convencieron.
Sin embargo, explicaron los deudos de Jerry, cuando iban por La India, el grupo que iba en un carro, los interceptó. Ellos se bajaron del carro y comenzaron a correr. Pero solo siguieron a Jerry. Cuando lo alcanzaron, lo mataron.
Jerry trabajaba como vendedor en una tienda de cerámicas. Vivía con su familia. Tenía dos hijos. Era el menor de dos hermanos.
En Baruta
A las 8:30 de la noche de este jueves, un hombre, al parecer miembro de la banda "Los Cabezones", asesinó a Ronny Ricardo Castro Aguilera, de 19 años. Lo interceptó en la calle Unión, sector la Vecindad del barrio Santa Cruz del Este, cuando compraba una tarjeta de teléfono.
Un tío lo esperaba para juntos llegar hasta la casa, relató el padre de la víctima, quien no quiso identificarse.
De un callejón salió el homicida y le gritó a Ronny: "aquí estás, así te quería agarrar". Y luego disparó tres tiros, de los varios que detonó, directo a la cabeza.
El tío auxilió de inmediato a Ronny y lo llevó directo al CDI de Chuao, pero llegó muerto. De acuerdo a fuentes policiales, el hecho tuvo lugar a 150 metros de un módulo de Polimiranda.
Al parecer, Ronny, el sábado, tuvo un problema con su asesino. En ese momento el pistolero le dijo que como iba con su hijo de ocho meses en brazos no le descargaba la pistola. Ronny le contestó que dejara la pistola, que el soltaba al niño. El hombre le respondió, "yo no soy boxeador" y se fue.
Con estos dos ingresos se totalizaron, según fuentes del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, 11 entradas a la morgue de Bello Monte desde el jueves en la mañana, hasta las 8 de la mañana de este viernes. En esa cuenta están incluidas todas las causas de muertes, incluyendo las naturales.
Jerry Andrés Godoy Andrade, de 28 años, murió en el sitio donde lo atacaron. Quedó sin vida en una calle que está por la parte de atrás de la Clínica Loira en El Paraíso, este viernes, a las 3:10 de la mañana aproximadamente.
Los amigos que iban con él fueron los que avisaron a la familia. Ellos le contaron a su tía, Carmen Andrade, que todo había pasado por un mal entendido que se generó en una discoteca donde habían pasado parte de la noche.
Al parecer, relató la mujer, la novia del asesino comenzó a coquetear con Jerry. El hombre, al darse cuenta, reclamó. Después de amenazar a Jerry le dijo que no lo quería ver más por la discoteca que está en el Centro Comercial Galerías El Paraíso. Jerry, según los amigos, trató de mediar. No quería problemas, así que decidió irse.
Afuera, intentaron abordar un taxi. El conductor no quería hacerles la carrera hasta San Martín porque se dio cuenta del problema que tenían con los otros jóvenes. Pero lo convencieron.
Sin embargo, explicaron los deudos de Jerry, cuando iban por La India, el grupo que iba en un carro, los interceptó. Ellos se bajaron del carro y comenzaron a correr. Pero solo siguieron a Jerry. Cuando lo alcanzaron, lo mataron.
Jerry trabajaba como vendedor en una tienda de cerámicas. Vivía con su familia. Tenía dos hijos. Era el menor de dos hermanos.
En Baruta
A las 8:30 de la noche de este jueves, un hombre, al parecer miembro de la banda "Los Cabezones", asesinó a Ronny Ricardo Castro Aguilera, de 19 años. Lo interceptó en la calle Unión, sector la Vecindad del barrio Santa Cruz del Este, cuando compraba una tarjeta de teléfono.
Un tío lo esperaba para juntos llegar hasta la casa, relató el padre de la víctima, quien no quiso identificarse.
De un callejón salió el homicida y le gritó a Ronny: "aquí estás, así te quería agarrar". Y luego disparó tres tiros, de los varios que detonó, directo a la cabeza.
El tío auxilió de inmediato a Ronny y lo llevó directo al CDI de Chuao, pero llegó muerto. De acuerdo a fuentes policiales, el hecho tuvo lugar a 150 metros de un módulo de Polimiranda.
Al parecer, Ronny, el sábado, tuvo un problema con su asesino. En ese momento el pistolero le dijo que como iba con su hijo de ocho meses en brazos no le descargaba la pistola. Ronny le contestó que dejara la pistola, que el soltaba al niño. El hombre le respondió, "yo no soy boxeador" y se fue.
Con estos dos ingresos se totalizaron, según fuentes del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, 11 entradas a la morgue de Bello Monte desde el jueves en la mañana, hasta las 8 de la mañana de este viernes. En esa cuenta están incluidas todas las causas de muertes, incluyendo las naturales.
Banda de plagiarios elige a sus víctimas por el carro
Cuatro de los miembros de ese grupo ya fueron detenidos por GNB
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Los detenidos fueron remitidos a penales distintos para que no hubiese el riesgo de fuga (Archivo)
MARÍA ISOLIETT IGLESIAS | EL UNIVERSAL
sábado 24 de septiembre de 2011 12:00 AM
Un grupo de, al menos, 21 maleantes forma parte de una banda de secuestradores que se especializan en el plagio corto, en urbanizaciones ubicadas hacia el Este de la ciudad.
De acuerdo a la información, extraoficial, ofrecida por funcionarios policiales, el grupo no opera entero a la vez. Se dividen por noches para buscar a sus potenciales víctimas. Es un delito de oportunidad, pues no salen a hacer seguimiento, sino que "pescan" a sus "secuestrables" según el modelo de carro que usen y los interceptan el lugar más apropiado para no dejar testigos.
Antes de salir a secuestrar, los investigadores han determinado que los criminales roban un carro y ese lo usan para las fechorías. Este grupo, según las averiguaciones, ha llegado a usar un mismo carro en más cinco hechos.
Este grupo además de cometer secuestros exprés, también roban en casas y apartamentos. Cuando la familia de la víctima no cuenta con dinero para pagar el rescate, los maleantes obligan a su secuestrado a llevarlos hasta la casa. Allí cargan con dinero, joyas y armas.
Norte y este azotados
De acuerdo a la mayoría de los casos conocidos por la policía, estos hombres han operado repetidas veces en distintos puntos del municipio Chacao y han incursionado en otras urbanizaciones también ubicadas hacia el este y hacia el norte de la ciudad.
Cuando intentaban penetrar en La Florida, específicamente por la avenida Los Jabillos, cuatro maleantes del grupo, que en ese momento operaban en la madrugada, fueron detenidos por la Guardia Nacional.
En la madrugada del 27 de junio, estos hombres interceptaron a un comerciante y lo secuestraron. Cuando se dieron cuenta que el hombre no tenía como pagar el rescate, fueron hasta la casa e intentaron robar. Algunos vecinos se dieron cuenta de lo que ocurría y avisaron a los efectivos de la Guardia Nacional.
Después de largas horas de negociación, los hombres se entregaron. Ellos, en el interrogatorio, fueron los que aportaron detalles de la organización.
Dos de los detenidos, informaron fuentes policiales, estaban solicitados. Uno por haberse evadido de la Penitenciaría General de Venezuela (no se especificó la fecha) y el otro por homicidio.
El día de la captura les incautaron dos pistolas, una solicitada por robo, y la otra, refería el sistema, estaba recuperada sin entregar. Los policías presumieron que pudo haber sido facilitada por algún funcionario. El fusil de asalto, que también les incautaron, estaba solicitado por hurto. También se recuperó una Cherokee, robada en mayo e incriminada en, al menos, cinco secuestros. MII
De acuerdo a la información, extraoficial, ofrecida por funcionarios policiales, el grupo no opera entero a la vez. Se dividen por noches para buscar a sus potenciales víctimas. Es un delito de oportunidad, pues no salen a hacer seguimiento, sino que "pescan" a sus "secuestrables" según el modelo de carro que usen y los interceptan el lugar más apropiado para no dejar testigos.
Antes de salir a secuestrar, los investigadores han determinado que los criminales roban un carro y ese lo usan para las fechorías. Este grupo, según las averiguaciones, ha llegado a usar un mismo carro en más cinco hechos.
Este grupo además de cometer secuestros exprés, también roban en casas y apartamentos. Cuando la familia de la víctima no cuenta con dinero para pagar el rescate, los maleantes obligan a su secuestrado a llevarlos hasta la casa. Allí cargan con dinero, joyas y armas.
Norte y este azotados
De acuerdo a la mayoría de los casos conocidos por la policía, estos hombres han operado repetidas veces en distintos puntos del municipio Chacao y han incursionado en otras urbanizaciones también ubicadas hacia el este y hacia el norte de la ciudad.
Cuando intentaban penetrar en La Florida, específicamente por la avenida Los Jabillos, cuatro maleantes del grupo, que en ese momento operaban en la madrugada, fueron detenidos por la Guardia Nacional.
En la madrugada del 27 de junio, estos hombres interceptaron a un comerciante y lo secuestraron. Cuando se dieron cuenta que el hombre no tenía como pagar el rescate, fueron hasta la casa e intentaron robar. Algunos vecinos se dieron cuenta de lo que ocurría y avisaron a los efectivos de la Guardia Nacional.
Después de largas horas de negociación, los hombres se entregaron. Ellos, en el interrogatorio, fueron los que aportaron detalles de la organización.
Dos de los detenidos, informaron fuentes policiales, estaban solicitados. Uno por haberse evadido de la Penitenciaría General de Venezuela (no se especificó la fecha) y el otro por homicidio.
El día de la captura les incautaron dos pistolas, una solicitada por robo, y la otra, refería el sistema, estaba recuperada sin entregar. Los policías presumieron que pudo haber sido facilitada por algún funcionario. El fusil de asalto, que también les incautaron, estaba solicitado por hurto. También se recuperó una Cherokee, robada en mayo e incriminada en, al menos, cinco secuestros. MII
Inseguridad
Taxista fue asesinado dentro de su garaje en Los Rosales
Han muerto 21 conductores de taxi en lo que va del año en Caracas
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Ramón Saavedra se desangró dentro de su vehículo, dijo su cuñada Amalia Bastidas FERNANDO SÁNCHEZ
EL UNIVERSAL
viernes 23 de septiembre de 2011 12:00 AM
Una huella de neumático sobre un charco alargado de sangre seca, fue lo único que quedó en el garaje de dos por cuatro metros de la casa Carmencita de la avenida Luis Razetti de Los Rosales.
Ramón Saavedra López, de 60 años ingresó al estacionamiento desde el interior de su hogar a las 6 y 45 minutos de la mañana del miércoles. Encendió su vehículo Cherolet Chevy, color blanco, para calentar el motor para la jornada diaria. Abrió el portón del garaje y las rejas naranja que separan la quinta de la calle.
Al voltear en dirección a su vehículo, dos antisociales ingresaron al recinto a sus espaldas. Cuando Saavedra se sentó en el vehículo para salir de retroceso, recibió cuatro heridas de bala en el costado derecho, y una en su brazo.
De acuerdo con Amalia Bastidas, cuñada de la víctima, las detonaciones despertaron a las cinco personas que se encontraban durmiendo en la casa. Los antisociales huyeron sin llevarse el carro, con la complicidad de otro sujeto que los esperó en un vehículo que no ha sido identificado por las autoridades.
"Estamos aterrados porque el crimen fue dentro de la casa. Ahora no podremos salir a la calle. La policía no hace nada", expresó Bastidas.
Un vecino de Saavedra trasladó al taxista de origen canario a la clínica Atías pero ingresó sin signos vitales. El conductor tenía desde los 17 años viviendo en el país. dejó a tres hijos y a su esposa.
21 taxistas muertos en el año
De acuerdo con cifras extraoficiales, el conductor de la línea Atabapo de Los Rosales, es el chofer número 21 que ha fallecido a manos del hampa.
Alexis Pacheco, socio número 005 de la línea y amigo de Saavedra exigió con lágrimas en los ojos mayor presencia policial en la zona. "¿A quién podemos reclamarle lo que aquí sucedio? Esto de la delincuencia no es mentira, es la verdad.
Pacheco indicó que los conductores de Atabapo han sido golpeados en cuatro oportunidades por los antisociales. Henry Guzmán y Pedro Andrade fueron asesinados para quitarles sus automóviles. Y el portugués Eleuterio Vieira, se ahorcó al no poder superar el robo de su taxi. A Vieira le sustrajeron tres vehículos, en tres oportunidades diferentes.
En otro caso, José Gregorio Salazar, de 27 años, falleció tras recibir el ataque de dos motorizados que le propinaron tres disparos en el pecho, en las adyacencias de la estación Zoológico de Caricuao.
Salazar fue herido la mañana del domingo. Fue trasladado al hospital Pérez Carreño, donde falleció.
Su familia se enteró del hecho el lunes y se trasladaron desde el interior para hacer los trámites funerarios. TRG
Ramón Saavedra López, de 60 años ingresó al estacionamiento desde el interior de su hogar a las 6 y 45 minutos de la mañana del miércoles. Encendió su vehículo Cherolet Chevy, color blanco, para calentar el motor para la jornada diaria. Abrió el portón del garaje y las rejas naranja que separan la quinta de la calle.
Al voltear en dirección a su vehículo, dos antisociales ingresaron al recinto a sus espaldas. Cuando Saavedra se sentó en el vehículo para salir de retroceso, recibió cuatro heridas de bala en el costado derecho, y una en su brazo.
De acuerdo con Amalia Bastidas, cuñada de la víctima, las detonaciones despertaron a las cinco personas que se encontraban durmiendo en la casa. Los antisociales huyeron sin llevarse el carro, con la complicidad de otro sujeto que los esperó en un vehículo que no ha sido identificado por las autoridades.
"Estamos aterrados porque el crimen fue dentro de la casa. Ahora no podremos salir a la calle. La policía no hace nada", expresó Bastidas.
Un vecino de Saavedra trasladó al taxista de origen canario a la clínica Atías pero ingresó sin signos vitales. El conductor tenía desde los 17 años viviendo en el país. dejó a tres hijos y a su esposa.
21 taxistas muertos en el año
De acuerdo con cifras extraoficiales, el conductor de la línea Atabapo de Los Rosales, es el chofer número 21 que ha fallecido a manos del hampa.
Alexis Pacheco, socio número 005 de la línea y amigo de Saavedra exigió con lágrimas en los ojos mayor presencia policial en la zona. "¿A quién podemos reclamarle lo que aquí sucedio? Esto de la delincuencia no es mentira, es la verdad.
Pacheco indicó que los conductores de Atabapo han sido golpeados en cuatro oportunidades por los antisociales. Henry Guzmán y Pedro Andrade fueron asesinados para quitarles sus automóviles. Y el portugués Eleuterio Vieira, se ahorcó al no poder superar el robo de su taxi. A Vieira le sustrajeron tres vehículos, en tres oportunidades diferentes.
En otro caso, José Gregorio Salazar, de 27 años, falleció tras recibir el ataque de dos motorizados que le propinaron tres disparos en el pecho, en las adyacencias de la estación Zoológico de Caricuao.
Salazar fue herido la mañana del domingo. Fue trasladado al hospital Pérez Carreño, donde falleció.
Su familia se enteró del hecho el lunes y se trasladaron desde el interior para hacer los trámites funerarios. TRG
Cargan con Bs. 1,7 millones en robo a blindado de Bolívar
Abrieron investigación porque presumen complicidad interna
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Cicpc realizó experticias en el sitio CORREO DEL CARONÍ / CORTESÍA
MARÍA RAMÍREZ CABELLO | ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL
jueves 22 de septiembre de 2011 12:00 AM
Ciudad Guayana.- Los custodios de la unidad 855 de Transporte de Valores Bancarios C.A. (Transbanca) se detuvieron, a las 6:30 am de ayer, a comer empanadas en la avenida Guayana, que comunica a Puerto Ordaz con Ciudad Bolívar, antes de partir a Tucupita, estado Delta Amacuro.
En el modesto sitio, seis sujetos que también comían empanadas asaltaron -con armas cortas- el camión que transportaba Bs. 1,7 millones. Tras cargar con el dinero, se fugaron en una camioneta Ford Explorer Eddie Bauer que abandonaron en la zona industrial Matanzas, cerca de la empresa Vhicoa. El vehículo fue incendiado.
"Se abrió la puerta posterior del camión y al bajarse uno de los custodios, los asaltantes procedieron a realizar el robo", informó el comandante de la Policía del estado Bolívar, Julio César Fuentes Manzulli, quien señaló que en el procedimiento de traslado de valores se violaron todos los protocolos de seguridad, pues la movilización de esta cantidad debió realizarse con custodia policial.
En el sitio del robo, el conductor auxiliar Darwin Malavé de 32 años murió, mientras que Reinaldo Cortés recibió un impacto de bala y fue trasladado al Instituto Clínico Unare. No obstante, su condición era estable.
Malavé tenía dos años y medio trabajando en la empresa Transbanca.
Solicitan investigación
Fuentes Manzulli indicó que solicitaron a la Fiscalía Superior del estado Bolívar y al Ministerio Público una investigación, pues presumen complicidad interna y planificación del asalto. "Es una exigencia que cuando se hacen traslados de grandes cantidades debe coordinarse la seguridad y custodia policial y eso no se hizo, por eso estamos solicitando una investigación contra dicha empresa".
"Si querían desayunar por qué no lo hicieron en el parador turístico -junto al peaje Puerto Ordaz- Ciudad Bolívar- en donde hay varios sitios de comida con mesas, sillas, seguridad policial y Guardia Nacional", agregó.
En el modesto sitio, seis sujetos que también comían empanadas asaltaron -con armas cortas- el camión que transportaba Bs. 1,7 millones. Tras cargar con el dinero, se fugaron en una camioneta Ford Explorer Eddie Bauer que abandonaron en la zona industrial Matanzas, cerca de la empresa Vhicoa. El vehículo fue incendiado.
"Se abrió la puerta posterior del camión y al bajarse uno de los custodios, los asaltantes procedieron a realizar el robo", informó el comandante de la Policía del estado Bolívar, Julio César Fuentes Manzulli, quien señaló que en el procedimiento de traslado de valores se violaron todos los protocolos de seguridad, pues la movilización de esta cantidad debió realizarse con custodia policial.
En el sitio del robo, el conductor auxiliar Darwin Malavé de 32 años murió, mientras que Reinaldo Cortés recibió un impacto de bala y fue trasladado al Instituto Clínico Unare. No obstante, su condición era estable.
Malavé tenía dos años y medio trabajando en la empresa Transbanca.
Solicitan investigación
Fuentes Manzulli indicó que solicitaron a la Fiscalía Superior del estado Bolívar y al Ministerio Público una investigación, pues presumen complicidad interna y planificación del asalto. "Es una exigencia que cuando se hacen traslados de grandes cantidades debe coordinarse la seguridad y custodia policial y eso no se hizo, por eso estamos solicitando una investigación contra dicha empresa".
"Si querían desayunar por qué no lo hicieron en el parador turístico -junto al peaje Puerto Ordaz- Ciudad Bolívar- en donde hay varios sitios de comida con mesas, sillas, seguridad policial y Guardia Nacional", agregó.
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