Yo soy

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martes, 27 de septiembre de 2011

Respeto al oráculo Bocaranda Sardi


RUNRUNES

NELSON BOCARANDA SARDI |  EL UNIVERSAL
martes 27 de septiembre de 2011  12:37 AM
ALTO 
EL IM-PACIENTE. La pregunta que surge espontáneamente entre la gente al escuchar al Presidente proclamar a los cuatro vientos que ya está curado y que su cáncer es cosa del pasado es ésta: ¿Y si ya está bien por qué siguen celebrando ritos, misas, liturgias, brujerías y ceremonias afines para que se cure? ( de allí partió el nombramiento de Maripili como ministra de la Juventud cuando la llamó diciéndole que esa designación obedecía su interés en que fuera "puente con la Iglesia Católica más que dedicarse a los problemas de los jóvenes". Recuerden su primera aparición logrando la misa con monseñor Moronta donde se le impusieron los Santos Óleos disimulados por el obispo como óleos de vida y no de muerte. Sus demás apariciones han sido matizadas con su adulancia musical). La segunda inquietud es en torno a los avances y retrocesos en las palabras presidenciales respecto a la enfermedad, pues así como ha dicho estar sano también intercala frases, como las del domingo: "aunque mi fuerza física no es la misma", "hay que tener cuidado con el tema de las defensas" y "el impacto de la quimioterapia" o la de unas semanas atrás "el cáncer no ha pasado". Su apariencia sigue dando pie a especulaciones ante el secretismo gubernamental. Las apuestas y las guerras internas dentro del chavismo no ayudan a la tranquilidad del paciente, condición indispensable para superar cuanto antes los efectos del cáncer y las demoledoras consecuencias del tratamiento. La realidad es que está en proceso de aislamiento obligado ante la aparición de una infección en la garganta -confesada por él mismo- debido a la baja en las defensas tras regresar de Cuba. La evaluación definitiva se le hará la semana próxima y allí tendrá el caudillo que tomar decisiones, no solo el cuanto a su salud, sino al proceso político que -a pesar de los que digan lo contrario- anda dando tumbos. Quienes me han seguido por esta columna y en www.runrun.es se habrán dado cuenta que he discrepado en cuanto al número de dosis de quimioterapias administradas. Siempre les he dicho una más de las anunciadas. Confirmo ahora, de nuevo, que se le han suministrado cinco sesiones. Una más de lo indicado por los médicos venezolanos y que provocó la negativa de ellos a seguir asistiendo al paciente pues se impuso siempre el criterio cubano, causante de ese tratamiento cuestionado tanto por los criollos como por los brasileros. Chávez no aguanta hoy una sexta quimioterapia y es por eso que le ordenaron reposo y aislamiento para su posterior evaluación. El canciller Nicolás Maduro sigue siendo su más cercano confidente después de la familia y sus edecanes de confianza. Sobré él descansa la ejecución política roja. ¿Lo madura? 

MEDIO 

CICPC. En nuestra web señalamos los movimientos que venía haciendo El Aissami para sacar de la policía judicial a Flores Trossel. La información que dejo colar a los medios sobre la destitución del jefe del Cicpc y todos los directivos que lo acompañaban los señala como supuestos integrantes de una red de extorsión y matraqueo a altos funcionarios del gobierno rojo, militares y algunos civiles, que se han enriquecido con operaciones "legales". Cadivi, Minal, Tesorería, Banfoandes serían algunos de los organismos desde donde se habrían hecho esas operaciones. El monto más allá de Bs 80 mil millones en efectivo. Hay sorpresas. 

BAJO 

MI WIKILEAK. Demostrando lo confiable de mis informaciones a través de esta columna en El Universal, mis programas de radio hoy en Éxitos FM y ahora en mi web Runrun.es, me complace haber sido citado en uno de los cables que ahora circulan por el mundo a través de las filtraciones de Wikileaks, que en muchos casos -no particularmente en el mío- han comprometido a las fuentes y a los diplomáticos de EEUU y otros países. Siendo mi trabajo el de recolectar información confiable para compartir con mis lectores o escuchas, en casi medio siglo de periodismo, me toca conversar y dialogar con una amplia gama de fuentes igualmente confiables que incluyen desde un mesonero, un militar o un colega periodista hasta en muchísimas oportunidades los diferentes embajadores acreditados en Venezuela o en cualquier otro país. (En esta vacación por el Medio Oriente seguí haciéndolo y de esos contactos con árabes e israelitas escribiré). No es sorprendente que así converse en cualquier evento -y mire que voy a muchos- con empresarios, funcionarios, militares o embajadores. Esas recepciones de las embajadas de Francia, Perú, EEUU, Inglaterra, Colombia, México, España, Italia, Canadá, Finlandia, Polonia, Marruecos, Egipto, Brasil o Chile, por solo mencionar algunas, a los que he asistido son parte de esa búsqueda informativa en la que vengo incurriendo gustoso desde hace años. Antes fueron la de Cuba, Irak, Libia, Nicaragua, Argentina o Bolivia, por mencionar a las que desde hace unos años no he sido invitado por razones obvias. Creo que poco de lo que he hablado en privado, a menos que sea con la confidencialidad acordada con la fuente, no ha salido comentado en mis espacios. Los que crean que esto habrá de cohibirme en seguir frecuentando fuentes diplomáticas de los llamados "imperios" están equivocados. En unas declaraciones que me pidieron recientemente en Jordania tanto la agencia AP como la revista Forbes y otros medios locales les dije que- conociendo al gobierno venezolano- muchos de sus funcionarios no aguantan que mis fuentes sean creíbles o que ellos no las tengan desde las alturas del poder, lo más seguro es que me acusen de "ser parte de la CIA o tarifado del imperio" y que ello no me afectará. Por lo pronto sigo ejerciendo mi periodismo de investigación y compartiéndolo con ustedes. El cable de Wikileaks por si solo se explica. El embajador americano era Patrick Duddy con el que me une, al igual que con su esposa que es una sobreviviente de cáncer de mamas como mi señora, una buena amistad que se cimentó cuando anuncié que el Presidente Chávez había aceptado recibirlo de nuevo como embajador de EEUU a pesar de haberlo echado del país con la seguridad de que EEUU hiciera lo mismo con el embajador Bernardo Álvarez en Washington. En ese caso mi fuente fue superior a las del gobierno de Obama y por eso siempre me bromeaba tras su regreso. Ni hablar hoy de mis fuentes de Cuba, de las que me enorgullezco de "cultivar" al más alto nivel. Seguiremos runruneando. 


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