Se repitió la tragedia de El Rosal sin medidas para ampliar la sede
Uno de los policías acusados en 2011 denunció ser chivo expiatorio del MIJ
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Los detenidos en las celdas de la División de Capturas fueron esposados de las celdas. Estaban en los pasillos a causa del hacinamiento CORTESÍA
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TOMÁS RAMÍREZ GONZÁLEZ | EL UNIVERSAL
lunes 16 de abril de 2012
En ninguna de las 620 páginas del informe de gestión del Ministerio de Interior y Justicia aparece registrada alguna inversión para mejorar la infraestructura de la División de Capturas del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, ubicada en El Rosal.
Yorman Hernández, de 28 años falleció en "El Fogón" una celda de 15 por cinco metros del referido centro de detención tras convulsionar entre los cuerpos de las decenas de personas que se encontraban hacinadas el 31 de marzo de este año.
De acuerdo con el testimonio de los familiares, efectivos de la División solicitaron 5 mil bolívares para mantenerlo en una celda sin hacinamiento. Como los allegados no tenían recursos para pagar la extorsión, el detenido fue trasladado a "el Fogón". Allí convulsionó varias y se le infectó la herida de bala que lo aquejaba.
El 6 de junio de 2011 Tareck El Aissami anunció una medida de asistencia técnica para la División tras la muerte de Pedro Cipriano Rivero, William Pérez y Rubén Arnal de 33, el 25 de mayo de ese año, en las misma celda donde falleció Hernández.
Chivos expiatorios del caso
Los agentes del Cicpc Maikel Borges, Jetson Díaz, Eduard Umbría, José Piñate, Mario Coti y el detective, Everth Rondón fueron acusados por la muerte de los detenidos. El 13 de octubre de 2011, el Tribunal 48 de Control admitió la acusación y ordenó el enjuiciamiento de los efectivos de bajo rango.
Desde las celdas de la Brigada de Acciones Especiales del Cicpc, Rondón defendió su inocencia al aclarar que no tuvo contacto físico con los detenidos. "Nosotros no implementamos el plan Madrugonazo. Ni siquiera aprehendimos a esos ciudadanos. La orden la cumplía el jefe del despacho (Caicedo) por orden del director (Flores Trosel) eso escapa totalmente de nuestras manos. Pareciera que el jefe del despacho hubiera sido yo", expresó.
El 19 de septiembre de 2011, Wilmer Flores Trosel, director del Cicpc cuando ocurrió el hecho, fue jubilado y condecorado con la Orden del Libertador en su segunda clase.
Rafael Caicedo, exdirector de la referida División, se encuentra evadido de la justicia desde que fue requerido por el tribunal 48 de Control.
Rondón denunció que antes que el MIJ aplicara el llamado plan "Madrugonazo al Hampa" no se tomaron las previsiones correspondientes para albergar a los detenidos en una infraestructura adecuada.
"La fiscalía nos acusa para evadir su responsabilidad porque ese día había un fiscal de guardia el 25 de mayo de 2011. El fiscal 80 Robert Ochoa. Está en las novedades. Desde las ocho de la mañana a las seis de la tarde. Iba todos los días a supervisar al despacho. Hablaban con los jefes a diario. Tenían conocimiento de todo eso. El fiscal es complice de esa situación y no está privado de libertad".
De acuerdo con el registro de novedades que llevaba la División, el año pasado fallecieron nueve personas producto del hacinamiento.
Los funcionarios policiales detenidos por los hechos se encuentran esperando juicio en las celdas del BAE.
Yorman Hernández, de 28 años falleció en "El Fogón" una celda de 15 por cinco metros del referido centro de detención tras convulsionar entre los cuerpos de las decenas de personas que se encontraban hacinadas el 31 de marzo de este año.
De acuerdo con el testimonio de los familiares, efectivos de la División solicitaron 5 mil bolívares para mantenerlo en una celda sin hacinamiento. Como los allegados no tenían recursos para pagar la extorsión, el detenido fue trasladado a "el Fogón". Allí convulsionó varias y se le infectó la herida de bala que lo aquejaba.
El 6 de junio de 2011 Tareck El Aissami anunció una medida de asistencia técnica para la División tras la muerte de Pedro Cipriano Rivero, William Pérez y Rubén Arnal de 33, el 25 de mayo de ese año, en las misma celda donde falleció Hernández.
Chivos expiatorios del caso
Los agentes del Cicpc Maikel Borges, Jetson Díaz, Eduard Umbría, José Piñate, Mario Coti y el detective, Everth Rondón fueron acusados por la muerte de los detenidos. El 13 de octubre de 2011, el Tribunal 48 de Control admitió la acusación y ordenó el enjuiciamiento de los efectivos de bajo rango.
Desde las celdas de la Brigada de Acciones Especiales del Cicpc, Rondón defendió su inocencia al aclarar que no tuvo contacto físico con los detenidos. "Nosotros no implementamos el plan Madrugonazo. Ni siquiera aprehendimos a esos ciudadanos. La orden la cumplía el jefe del despacho (Caicedo) por orden del director (Flores Trosel) eso escapa totalmente de nuestras manos. Pareciera que el jefe del despacho hubiera sido yo", expresó.
El 19 de septiembre de 2011, Wilmer Flores Trosel, director del Cicpc cuando ocurrió el hecho, fue jubilado y condecorado con la Orden del Libertador en su segunda clase.
Rafael Caicedo, exdirector de la referida División, se encuentra evadido de la justicia desde que fue requerido por el tribunal 48 de Control.
Rondón denunció que antes que el MIJ aplicara el llamado plan "Madrugonazo al Hampa" no se tomaron las previsiones correspondientes para albergar a los detenidos en una infraestructura adecuada.
"La fiscalía nos acusa para evadir su responsabilidad porque ese día había un fiscal de guardia el 25 de mayo de 2011. El fiscal 80 Robert Ochoa. Está en las novedades. Desde las ocho de la mañana a las seis de la tarde. Iba todos los días a supervisar al despacho. Hablaban con los jefes a diario. Tenían conocimiento de todo eso. El fiscal es complice de esa situación y no está privado de libertad".
De acuerdo con el registro de novedades que llevaba la División, el año pasado fallecieron nueve personas producto del hacinamiento.
Los funcionarios policiales detenidos por los hechos se encuentran esperando juicio en las celdas del BAE.
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